Wednesday, December 12, 2012

OSTRACISMO

De niña fui condenada a la soledad, pasaba las vacaciones de verano sola en casa, si exceptuamos unos pocos y anhelados días en un hotel al lado del mar. En el hotel casi nunca hice amigos, en realidad prefería estar sola, me había acostumbrado a ello, en mis juegos no había demasiado sitio para nadie más. Y continúa siendo así...

1 comment:

missangria said...

Recuerdo esa sensación, todavía me ocurre que a veces la gente me da mucha pereza